Domicilia el cargo de tus servicios a tu cuenta o tarjeta de crédito, desde tu app Santander.
Centraliza todos tus pagos desde un mismo lugar
No te preocupes por la fecha límite de pago, nosotros nos encargamos
Tú decides cuándo pausar y reactivar la domiciliación
Evita largas filas en el banco o con tu proveedor
Tus operaciones están protegidas
Inicia sesión en tu app Santander. Dirígete al menú en la parte superior derecha.
Elige “Pagos”, seguido de “Domiciliación de servicios”.
Selecciona el servicio a domiciliar.
Elige el “medio de pago” e ingresa la “referencia” del servicio.
Escribe el alias con el que identificarás el servicio y si lo deseas, elige una de las reglas para delimitar el monto a pagar.
Confirma los datos, selecciona “Continuar”.
Ingresa tu clave SuperToken de 4 dígitos.
¡Listo! Domiciliaste el pago de tu servicio. Selecciona “Ver mis servicios” para visualizar aquellos domiciliados.
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